La Zontes Z2-125 es una naked de corte económico pero con el equipamiento y acabados propios de la marca asiática. Con la  Z2-125, Zontes deja un poco de lado la marcada estética vanguardista que domina en sus motos y apuesta por unas líneas más convencionales y redondeadas no exentas de deportividad. Como en todas las naked, el depósito de gasolina, con 12,5 litros de capacidad, cobra vital importancia desde el punto de vista estético, el cual ha sido moldeado para conseguir la mejor ergonomía posible. En los laterales, las canalizaciones del aire hacia el radiador otorgan cierto aire musculoso al conjunto en armonía con el faro delantero, de grandes dimensiones y full-LED.

El motor de la Z2-125 es un monocilíndrico 4T con homologación Euro5 que brinda una potencia cercana a los 15 CV a 9.000 rpm. Es un propulsor de fabricación propia bastante moderno, dotado de refrigeración líquida, cuatro válvulas, inyección electrónica desarrollada po Bosch y embrague antirrebote. A esto hay que añadir los dos modos de conducción, Deportivo y Económico, seleccionables desde el manillar.

El chasis está fabricado en acero, mientras que el basculante, asimétrico, es de aluminio con los nervios a la vista, un diseño que es señal de identidad de Zontes. Anclado a él encontramos un monoamortiguador regulable en precarga; delante se ha montado una horquilla invertida con unas vistosas botellas doradas. Los frenos son de disco, el delantero de 300 mm con pinza de doble pistón y el trasero de 230 mm con pinza de un pistón, y con ABS de Bosch.

En cuanto al equipamiento, incidir en el empleo de sistema LED en todas sus luces, destacando también el faro posterior con guías luminosas verticales y los intermitentes con forma de flecha, la instrumentación digital con pantalla LCD de forma triangular y con numerosa información -marcha engranada, entre otros-, piñas retroiluminadas, toma USB, topes anticaídas, manetas regulables..